Dicen que no hay nada como alcanzar estados de cierta confusión para desarrollar nuestro cerebro y por tanto, nuestra capacidad para resolver problemas. Es como ir al gimnasio para ejercitar los músculos.
Semana tras semana, casi sin darnos cuenta, mis compañeros del EMBA y yo, trabajamos esa habilidad, por ejemplo cuando nos enfrentamos a algún caso de índole financiera.
Estamos formando un grupo de esos que huelen a mantenerse muchos años unidos.
Sergio, Salvador, Juanes, Juanma y resto de compañer@s… ¡Es un gustazo trabajar con vosotros!
Avanzamos y crecemos unidos.